¿Estudiar inglés o irte con Working Holiday? Comparativa real para chilenos
Tomar la decisión entre estudiar inglés en el extranjero o lanzarte a una experiencia Working Holiday (WH) es clave para jóvenes chilenos que buscan combinar aprendizaje, conocimiento cultural y oportunidades laborales. Ambas opciones ofrecen ventajas, pero el mejor camino depende de tus metas personales, nivel de inglés, presupuesto y deseos de inmersión.
Diferencias clave entre estar en un curso de inglés y una Working Holiday
Duración y flexibilidad
Un curso de inglés suele ofrecer programas estructurados, que van desde un mes hasta un año según la institución. Las fechas están prefijadas y se adaptan al calendario académico. En contraste, la Working Holiday visa permite permanecer hasta 12 meses con libertad para entrar y salir del país. No hay horarios fijos, y puedes ajustar tu estadía al trabajo y al viaje, lo que brinda una flexibilidad total .
Modalidad de aprendizaje
En un entorno académico, el aprendizaje sigue un plan didáctico con compañeros de diversas nacionalidades. Se enfatiza la gramática, pronunciación, escritura y lectura mediante clases presenciales o en línea. La WH pone a prueba tu inglés en contextos reales: trabajo en retail, conversaciones informales, resolución de situaciones cotidianas; es un tipo de aprendizaje natural que exige salir de la “burbuja hispanohablante” .
Enfoque en trabajo
Con una WH puedes trabajar legalmente, generando ingresos para sostener tu estadía y viajes. En cambio, con una visa de estudiante generalmente las horas de trabajo suelen estar limitadas (por ejemplo, 20 hrs/semana) y requieren autorización adicional. Esto reduce tu capacidad para costear la experiencia o ampliar tu movilidad .
Visa de estudiante vs Working Holiday
Un curso intensivo en Australia, por ejemplo, implica una visa de estudiante con un costo cercano a CLP 950.000, un seguro médico obligatorio y el valor del curso (aproximadamente CLP 3.300.000), lo que suma un total alrededor de CLP 4.250.000.
En cambio, una Working Holiday suele tener un costo de CLP 390.000, seguro internacional, y en algunos casos un examen IELTS, lo que suma entre CLP 600.000 y 1.200.000, siendo significativamente más económico.
Una comparación simple refleja que la WH puede costar casi CLP 2.700.000 – 3.700.000 menos que una experiencia exclusivamente académica, sin incluir hospedaje ni gastos básicos.
Aprendizaje de inglés: ¿aulas o práctica diaria?
Cursos intensivos
El enfoque tradicional en las aulas proporciona estructuras pedagógicas claras, apoyo docente y comunidad académica. Estos espacios favorecen el desarrollo de habilidades formales, particularmente para quienes están en niveles iniciales o tienen objetivos específicos —como aprobar exámenes oficiales— .
WH como escuela de vida
Por su parte, una Working Holiday funciona como una inmersión total: el inglés se usa para comunicarte en el trabajo, en el supermercado, al buscar alojamiento o ingresar al sistema de salud local. Este método exige disciplina para evitar caer en la comodidad del español y aprovechar cada oportunidad de exposición real al idioma.
Oportunidades laborales y crecimiento profesional
VISA Working Holiday
Ganarás experiencia laboral real y tendrás oportunidad para ahorrar. Programas en países como Australia permiten extender la visa si trabajas en zonas regionales, prolongando la estadía hasta 3 años. Esto no solo enriquece tu currículum, sino que también aporta independencia económica y madurez personal.
VISA Estudiante
El foco principal es el aprendizaje. Si bien es posible trabajar, el horario limitado y los requisitos adicionales lo hacen menos viable para quienes dependen del ingreso o buscan movilidad laboral significativa.
¿Para quién conviene cada opción?
- Curso de inglés: Ideal para quienes buscan estructura académica y tienen niveles iniciales de inglés. Es la mejor opción si necesitas certificaciones formales, clases regulares y un entorno académico controlado.
- Working Holiday: Recomendado para jóvenes de 18 a 35 años con nivel intermedio de inglés, autonomía para enfrentar desafíos cotidianos, predisposición a trabajar en sectores no especializados y deseo de ahorro y viaje.
Cómo combinar ambas opciones: Estudio + Working Holiday
Una estrategia efectiva es invertir 3 a 6 meses en un curso intensivo, para fortalecer la base del idioma, y luego aplicar a una Working Holiday para impulsar tu fluidez, independencia y experiencia real en el extranjero. Este modelo híbrido te permite comenzar con una buena estructura y luego maximizar los beneficios de la inmersión total .
Siempre es un buen momento para estudiar inglés, ya sea antes o después de postular a la Working Holiday. Ten en cuenta que este tipo de visa no tiene una fecha fija de respuesta, pero si resultas seleccionado, por ejemplo en el caso de Canadá, tendrás hasta un año para ingresar al país. Ese periodo se puede aprovechar no solo para ahorrar, sino también para prepararte mejor con el idioma, lo que te abrirá más puertas una vez que llegues.